Villa hermosa y de gente amistosa, situada en uno de los vallecitos formados por el río Sondondo, Ayacucho; parajes misteriosos de los formidables Rukanas-Antamarkas. Vecinos nuestros son: Huaycahuacho, Ccecca, Aucará, Cabana Sur, Sondondo, Chipao, Chacralla, Huacaña, Mayo Luren y muchas otras comunidades, quienes guardan en su memoria, la habilidad de nuestros danzak's, arpistas y violinistas.
lunes, 14 de julio de 2008
San Diego, patrono de Ishua
Nació en la primavera del año 1889, en San Nicolás del Puerto, villa del Arzobispado y provincia da Sevilla, entre Constantina y Cazalla, en plena Sierra Morena. Ingresó en la orden de los Franciscanos en el convento de Arrizafa (Córdoba). En 1441 fue enviado como misionero a las Islas Canarias, vivió en Fuerteventura hasta que regreso a España en 1449. Al año siguiente hizo una peregrinación a Roma para asistir a la canonización de San Bernardino de Siena. Se hospedó en Aracoeli y una epidemia lo obligó a permanecer en Roma asistiendo a los enfermos. De regreso a España, continuó desempeñando los oficios de portero y de cocinero en varios conventos, el último de los cuales fue el de Santa María de Jesús en Alcalá de Henares (Madrid). Sus restos incorruptos reposan en la Catedral Magistral de Alcalá de Henares en una urna de plata del siglo XVII y su cuerpo se expone todos los años el 13 de noviembre.
(Tomado de Enciclopedia Libre Universal)
Procesión de San Diego realizado en el mes de Noviembre a través de las calles limeñas. Siempre acompañado, por supuesto, de cuadrillas de danzantes de tijeras, banda de músicos y los respectivos carguyocs. Junto a la fiesta de la Virgen de Cocharcas y San Isidro Labrador conforman lo que denominamos las fiestas mayores del pueblo. Hasta la década de los años 50's, los danzantes de tijeras, no eran muy conocidos por estos lares, aunque ya se muestran en una acuarela de Pancho Fierro de 1835; recién con la ayuda de José M. Arguedas es que se exhiben al mundo entero; es de las pocas expresiones de arte que concitan el interés en cualquier lugar.
Dama ishuana en la calle central de pueblo llevando forraje para su ganado; si nos fijamos en el límpido cielo azul ayacuchano, notaremos que se trata de una estación estival (Mayo hasta Octubre), por el contrario, cuando el cielo está cargado de nubes (más claro y limpio que el del color panza de burro limeño, por si acaso) es época de lluvias y consecuentemente, todo el paisaje se tiñe de verde, amén de una exhuberante explosión de frutas (tunas, nísperos, duraznos, manzanas, etc.) y vegetales.
Es la estación de las fiestas de carnavales, la alegría juvenil, la abundante pesca y cosecha de todo tipo de tunas (Enero hasta Abril). Si desean visitar Ishua, es la temporada perfecta: degustarán tiernísimos choclos recién cosechados, probarán las papitas amarillas del lugar y saborearán el queso hecho a la usanza antigua; como mencionaba el arquero de la selección española, Iker Casillas, - en una reciente visita al Cuzco - degustar en esta temporada choclitos tiernos acompañados de queso y papitas serranas arenosas, puede tildarse de exquisitez; antaño era todo un desafío llegar hasta el pueblo, pues debido a las lluvias que se presentaban por esos meses, había que realizar trasbordos a camiones, sortear vías llenas de fango, cruzar estrechos y precarios puentecillos de madera, en fin, una odisea.
Apenas, el bús o camión, empezaba la subida de la cuesta de Toro Muerto (Nazca) en dirección hacia la tierra de los soras y lucanas, se iniciaba entre los viajeros que provenían desde Lima, el ritual de encomendarse a todos los santos y jurar ir a misa todos los Domingos si es que salían bien librados de esta travesía.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario